Del ultimo documento, sinceramente creo que algunos principios Mitchell son esquivados, imagino esto debido al difícil encaje entre sensibilidades dentro de ese entorno, pero como en otras ocasiones tengo la sensación de que después de palabras en lo medios, presentaciones calculadas y discurso medidos hasta la ultima coma, nos siguen pasando su patata al resto de la sociedad. Una sociedad que viene de esperanzas rotas por los que finalmente terminan decidiendo el futuro de un colectivo como es el de la IA y cargándose palabras de compromiso.
En este momento esta bien dar pasos, pero una cosa es darlos y otra decir que se darán, sumando al argumento de la duda razonable, la prevención y la falta de legitimidad de aquellos que prometen nuevas esperanzas. Olvidándonos de la ingenuidad, podríamos abrir los brazos a las voluntades, pero yo no quiero vivir otra depresión por otro fracaso ajeno. La realidad tozuda, me dice como deben ser ellos los que den los primeros pasos, en el fondo esto es como cunado un niño da su primer paso, es algo por la convicción, la voluntad y las ganas de lograr algo, la necesidad de coger el juguete que en ese momento unos aitas no te pueden dar, se lanzan y tu ves ese primer intento, para los siguientes pasos tendremos la prevención de acompañarles, pero el primero es el que supone el riesgo y la voluntad, pero siempre solo.
No me gustaría resumirlo en el "que ellos se saquen sus propias castañas del fuego", pero la sociedad debe ser justa, inteligente, consecuente y critica, no nos puede valer solo la fe para un equipo ya cuarentón. En este panorama hay otras opciones que han dado el paso y se han integrado en nuestra normalidad limitada, todos los abertzales queremos construir nuestra Nación, unos llevan treinta años esquivando los banderines en el slalom, otros han estado esos mismos años esperando en la caseta el mejor momento y los que ahora me quieren hacer sentir la responsabilidad de sus pasos y de esa fe que aparentemente les debo, estuvieron tirando bolas desde la red y cambiando los banderines de sitio para que nuestro intentos no cruzasen la meta, que no tengan dudas, estaremos en la pista y no cambiaremos los banderines, nunca los hemos cambiado, no nos pidáis mas actos de fe sin estar colocados en la línea de salida.